Recordaba el otro día con unos amigo cuando había sido la primera vez que habían aparecido los móviles en tu vida.
En mi caso fue en cáceres en último de carrera cuando el vecino de habitación apareció con un cacharro alcatel azul que había comprado en el nuevo carreful a un céntimo de euro, si no falla la memoria. Claro que lo primero que pensé y dije es que yo nunca estaría atado a un invento tan siniestro, jeje, que equivocado estaba.
Ahora abriendo el eskipe también me ha venido a la mente la primera vez que usé un programa de mensajería instantánea que fue el mesenyer de hotmail con pluton79 desde la facultad en madrid y cómo la casualidad quiso que él estuviera en ese momento conectado y, como por arte de magia, empezara a hablar con él. Me recorrió un escalofrío de placer ver como en un segundo estaba intercambiando palabras con un amigo al otro lado de la A-5. Tanto que no me lo creía, como esas veces en que de repente te parece haber descubierto algo maravilloso.
martes, enero 09, 2007
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1 comentario:
Mágico. Sí. Algo así, como cuando te escriben el primer comentario en el blog...
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