lunes, noviembre 27, 2006

212_aRRIMANDO

Cuando conocí los móviles pensé que nunca tendría necesidad de algo tan tonto y esclavo, creí que el carnet me lo sacaba para lucirlo y algún viaje esporádico, lo de la agenda no iba conmigo. Estaba convencido que nunca se me acabarían las ganas de salir un sábado noche, incluso que un fin de semana con los colegas de toda la vida siempre sería un cachondeo imparable. Juraba que en ningún caso dejaría que me creciera la barriga y antes me esforzaría en hacer deporte con mi deslumbrante chándal. Soñaba con una compañera a la vez amiga y cómplice y estar enamorados para siempre.
Tal vez me estoy convirtiendo en lo que creía el ANTI-YO, quizás es mejor desaparecer jOVEN.

"¿Y acaso son menos hermosas las alas de la mariposa si se nubla el sol?"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No se si es cierto lo que he visto o es el efecto de una moza...

Qué bien! hoy todo es tan distinto,
parece que el mundo funciona...

Que haríamos sin las mujeres?

Salu2

jAVieR dijo...

Ya sabemos que hay personas que se enamoran veinte veces al día, así que será una mOZA.
Enhorabuena por el accesit, mañana os dedico la entrada enterita.